Se debate el mecanismo de Compras Responsables de Madera a través de un foro radial nacional

Para este programa, se entrevistó a Gonzalo Peña en Bolivia y a Estevão Braga de Brasil, ambos expertos en el tema de compras responsables de la WWF, quienes han avanzado en la implementación de este mecanismo en las ciudades de Santa Cruz y de Sao Paulo respectivamente. Las compras públicas responsables y sostenibles implican que el Estado tiene que asegurarse que es responsable por la madera que compra, que verifica que su origen es legal y que no incentiva la deforestación ni la desaparición de las especies maderables, como la caoba o el cedro. 

En el caso de Ecuador, el Estado es el mayor consumidor de madera. El Estado compra madera para hacer los nuevos rieles del ferrocarril, para las construcciones escolares y pupitres, para edificios y proyectos de vivienda, y para los grandes proyectos de infraestructura. Si el país lograría avanzar en un programa de compras responsables por parte del Gobierno Nacional y de los gobiernos locales, se habrá dado un paso estratégico hacia la conservación y uso sostenible de los bosques nativos, señaló Bernardo Ortiz, Director de TRAFFIC y moderador del debate.

Los mecanismos de Compras Sustentables y Responsables tratan de impulsar que diversas ciudades y el Gobierno Nacional se comprometan al desarrollo de políticas que fomenten este tipo de programas forestales voluntarios. 

El Estado de Sao Paolo en Brasil, por ejemplo, es uno de los mayores consumidores de madera tropical del mundo. Consume alrededor de 4 millones de metros cúbicos de madera tropical al año. Este volumen es mayor que todo el consumo de madera tropical de los países de la Unión Europea juntos. 

La metodología que se emplea para avanzar con este mecanismo, es empezar por constituir grupos de trabajo dentro de las municipalidades u otras instancias estatales, para desarrollar políticas de manera participativa e identificar cuáles son las demandas, y cuáles son las capacidades existentes. Si no existen capacidades, se inician programas de entrenamiento para el personal de la municipalidad para desarrollar un programa de compras responsable, se define cuál es la documentación necesaria, se señala cómo desarrollar proyectos de leyes para crear la estructura legal para que se puedan exigir a los proveedores, y para conocer cuáles son los requisitos para implementar un programa de compras responsables, entre otros aspectos. 

Asimismo, es fundamental lograr un acuerdo entre el sector productivo, las ONGs y el Gobierno, en el cual todos los interesados trabajan juntos la política sobre compras responsables de madera. Si no se cuenta con los tres sectores difícilmente se va a lograr el éxito, señaló Braga. Los acuerdos permiten lograr consensos sobre cómo comprobar que las comunidades y el sector privado están ofertando madera que proviene de bosques bien manejados y que se respetan los derechos de los grupos humanos en sus lugares de trabajo, a través de diversos tipos de certificación.

Doris Cordero, especialista forestal de UICN-Sur, señaló que en el Estado Amazónico de Acre, en Brasil, consume el 30% de la madera que se produce en dicho Estado. Hoy en día este Estado se ha avocado a hacer conservación y promover el manejo sostenible de bosques, cumpliendo con criterios ambientales, sociales y económicos, bajo un marco de sostenibilidad, con el apoyo de la UICN. 

Señaló que todos los sectores tienen responsabilidad en el manejo y conservación de los bosques: tanto el sector gubernamental, junto con las ONGs, el sector privado y las comunidades, con responsabilidades diferenciadas. Subrayó que el tema central es el manejo forestal sostenible, el cual incluye que se maneje el bosque para que permanezca a largo plazo, que se paguen precios justos por la madera extraída, que se conserve la biodiversidad y las fuentes de agua, y que no exista ningún tipo de trabajo infantil vinculado.

Luis Duchicela, de Rainforest Alliance, subrayó que los estudios demuestran que la madera que tiene un origen legal, es una madera que genera beneficios sociales y ambientales, a través de la generación de alianzas comerciales, donde no existe una explotación del más grande sobre el más pequeño, sino que se consolida una mayor equidad en la cadena de valor. De esta manera, un Estado o municipio está asegurando una serie de beneficios incluido los económicos. 

Señaló que en Ecuador falta una estrategia compartida intersectorial para establecer programas de compras responsables y que se requiere alinear al mercado hacia la conservación y manejo sostenible de los bosques. Opinó que existen factores en la sociedad que generan la destrucción de los bosques, y que una fuerza importante es el mercado. Subrayó que muchas veces aún los pequeños dueños de bosques o los grupos indígenas son cómplices de la tala ilegal, por presiones económicas. Planteó que si el mercado estuviera orientado a que el Estado y todos los demás sectores se comprometieran a comprar responsablemente la madera, a través de la certificación forestal, esta fuerza reorientaría la degradación de los bosques.

Por último, enfatizó que en Ecuador no se ha dado suficiente importancia a la certificación forestal. Los dueños de los bosques, los que viven de la madera, tienen que obtenerla de una manera que sea legal y rentable para ellos, y de ahí la necesidad de un manejo forestal sostenible. Si los dueños de bosques aplicaran el manejo forestal sostenible y se promoviera ampliamente los procesos de certificación, podríamos ver en corto plazo un enorme impacto que permitiría tanto las ventas responsables como las compras responsables, para los sectores vinculados a la madera, señaló Duchicela.

DEBATE COMPRAS RESPONSABLES

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El Foro Nacional Radial fue cofinanciado por TRAFFIC, Solidaridad Internacional, CORAPE, la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha y la Comisión Europea